Aunque cada lugar tiene su propia identidad, la CDMX y el Estado de México poseen muchos atributos en común; uno de ellos es su larga tradición culinaria.
Por eso, sentarse a la mesa de Pujol, no solo significa disfrutar del ambiente de un espacio con clase, de moderno e impecable diseño. Es también abrir los sentidos para contagiarse de la pasión que Enrique Olvera transmite por la comida mexicana, rescatando y resaltando ingredientes que transforma en creaciones originales e inteligentes.
Muestra de ello son la barra de tacos estilo omekase o el menú de degustación siempre novedoso. Auténtica experiencia gourmet que no deja indiferente a nadie.
Lee también: 4 destinos para viajar por el barroco mexicano
Muy céntrico. Buena combinación de arquitectura, arte y diseño con acento urbano retro. Alberca, restaurante.
Palacio colonial transformado en contemporáneo hotel boutique. Alberca, jacuzzi, terraza con vista a la ciudad.
Elegante, clásico, con privilegiada ubicación. Cómodas habitaciones, silenciosas. Cálido servicio. Restaurante de fina cocina italiana.
Chic, minimalista, trendy. Spa, gimnasio, alberca, solárium, terraza. Ideal parejas, viajes de trabajo.
Moderno, funcional, elegante. Fitness center, alberca, cancha de tenis, centro de negocios. Buena oferta gastronómica.
Lujo y confort contemporáneo con dos convenientes ubicaciones. Gastronomía de calidad. Gimnasio, alberca, spa (Santa Fe).
Refinado, cálido, contemporáneo. Sobresaliente cocina gourmet mexicana (Dulce Patria) e internacional (Anatol). Spa.
Vanguardista, cosmopolita, sofisticado. Ideal plan romántico o viajes de negocios. Spa de primera.
Family friendly; céntrico, upscale, sofisticado y lujoso. Gran spa; equipado gym, alberca. Concierge y mayordomo.
Funcional, moderno, ideal para negocios, convenciones o eventos sociales. Exclusivas camas de firma propia; gym, spa.
Contemporáneo, de ambiente adulto upscale. Cocina internacional con acento mediterráneo encabezada por Alberto Ituarte. Interesantes vinos.
Pequeño y sobrio sitio de cocina francesa tradicional. Servicio personalizado, supervisado por su propietario Arturo Cervantes.
Genuina comida mexicana en manos del genial chef Ricardo Muñoz Zurita. Must: desayunos y festivales gastronómicos. Excelente costo-beneficio.
Cocina de autor en casona porfiriana de ecléctica decoración con animado ambiente. Buena coctelería de la casa.
Bohemio, tranquilo. Clásicos platos portugueses de calidad y sazón constantes. Panadería artesanal. Recomendables desayunos.
Desenfadado spot de comida mexicana casera con el sello del chef Edgar Núñez. Imperdibles: mezcal y sope de tuétano con escamoles.
Comida tradicional mexicana. De las mejores opciones para desayunar en la capital. Panadería casera. Varias sucursales (San Ángel, Lomas, Centro).
Comida española con toque vasco e internacional en ambiente adulto gourmet (de mis favoritos). Selecta cava.
Casual, relajado. Cocina argentina con toque mexicano de casera sazón. Ideal desde desayunos hasta cenas.
Clásicos feudos de consistente cocina mexicana con acento contemporáneo a cargo de la chef Mónica Beteta.
El mejor de cocina china. Recetas de origen y materia prima de calidad. Ambiente adulto contemporáneo.
Un must dentro del Four Seasons. Original cocina italiana de calidad y fina sazón. Interesante cava. Servicio profesional.
Cocina italiana tradicional con acento contemporáneo en cálida atmósfera de moderna elegancia. Terraza. Caro, lo vale.
Acogedor, refinado, con agraciada terraza. Fresca cocina mediterránea con toques del Medio Oriente encabezada por Abel Hernández.
Cómodo, fresco, con mucha historia. Cocina mexicana con twist internacional de sazón consistente. Ideal desde desayunos hasta cenas.
Spot foodie de auténtica comida oaxaqueña honestamente ejecutada por el chef Alam Méndez. Gran costo-beneficio. Desayunos.
El máximo exponente de la cocina mexicana contemporánea a nivel internacional, la experiencia en Pujol es impecable.
Fresca cocina de mar con influencia mediterránea y acento oriental. Buenos desayunos. Varias sucursales (San Ángel, Coyoacán, Centro Histórico, Santa Fe, Bosques de las Lomas).
Pequeño, cool y hipster sitio de cocina italiana dirigido por Marco Carboni. Pastas frescas artesanales. Buenos vinos por copeo.
Vanguardista propuesta de cocina mexicana contemporánea del chef Edgar Núñez. Ambientado lounge. Recomiendo: menú degustación.
Pequeño, tranquilo, family friendly. Limpias y acogedoras habitaciones con desayuno incluido. Cálido servicio.
Rústico y cálido bed & breakfast solo para adultos. 12 habitaciones (las mejores con terraza). Cuidados jardines.
Antigua casona con obras de artistas locales, donde lo sobresaliente son pepitos y fondues. Agradable terraza y jardín.
Tranquilo, cool, bohemio. Comida casera con toque italiano. Recomendable para tomar la copa o postre con café.
Comida mexicana con énfasis en producto local y acento slow food en bohemio y rústico ambiente. Precios accesibles.
Simpática terraza apta para tomar café con postre o botanear entre amigos con cerveza, vino o mezcal.
Céntrico, funcional, moderno, apto para estancias de trabajo o placer. Eficiente servicio. Gimnasio, spa; buen restaurante.
Confort contemporáneo enfocado a viajeros de negocios. Servicio y calidad con el sello Marriott. Gimnasio, desayuno buffet.
Un must, donde el chef Pablo Salas da un refresh contemporáneo a la tradicional cocina mexiquense. Sugiero: menú degustación.
Simpático bistro; muy buena opción para desayunar (panadería recién horneada), tomar café o comer con tranquila sobremesa.
Carnes de calidad y platillos ítalo argentinos en relajada atmósfera. Ideal para comidas de negocios u ocasiones especiales.
Aunque simplón, vale la pena por su consistente cocina mexicana de inspiración prehispánica. Buenos vinos.
Familiar y casual. Comida mexicana con acento contemporáneo en porciones bien servidas a precios razonables. Almuerzos dominicales.
Familiar y casual. Pescados y mariscos de sazón sinaloense con la calidad estándar de esta famosa cadena.
Profesional cadena sonorense especializada en cortes de calidad. Buen ambiente (música DJ). Mis consentidos: camarones y rib eye.
Cocina mexicana moderna con sazón constante en relajada atmósfera familiar. Área infantil.
Contemporáneo con buen ambiente (a veces ruidoso). Sus highlights: carnes de calidad, drinks dobles y conocedor servicio.
Hotel boutique de 7 suites, para adultos que buscan relajarse. Pequeña alberca, bonita terraza con jacuzzi.
A unos pasos del lago. 28 habitaciones cálidas, minimalistas. Buena gastronomía. Agradable y ambientado roof bar.
Místico entorno, para darse un relax y reconectarse espiritualmente. Impresionantes vistas. Spa, tenis, golf, club náutico e hípico.
Family & pet friendly, rodeado de naturaleza. Spa, canchas de fútbol, tenis y pádel; campo de golf.
Fino estilo rústico en pleno bosque; para disfrutar de aventura y naturaleza en familia. Spa, buena cocina.
Tranquilo, familiar, de los consentidos de Valle. Genuina comida italiana. Buenas pastas, pizzas y risottos.
Familiares y clásicos feudos con consistente cocina de fusión ítalo-mexicana preparada artesanalmente. Interesantes vinos. Imperdibles: pizzas, alcachofa al horno.
De los sitios para cenar al atardecer con vista al lago. Cocina internacional constante y de calidad.
Relajada y rústica franquicia italiana, popular por sus pizzas a precios razonables.
Acogedor, atendido por su chef-propietario. Frescas pastas caseras y pizzas hechas al momento en horno de piedra.
Sencillo pero cálido. Concurrido por sus tradicionales guisos ibéricos preparados con esmero. Recomiendo: tapas, paella.